¿En qué sueles pensar?
¿Cuál es tu primer pensamiento del día? ¿Y el último? ¿Son agradables todos tus pensamientos? ¿Cómo consigues parar? ¿Qué pasaría si mañana al despertar te levantases desprovisto del lenguaje? ¿Cómo serían entonces tus pensamientos sin las palabras? ¿Podrías imaginártelo? Durante el día convivimos con un sin fin de pensamientos que deambulan al azar, despistado nuestros quehaceres. Pensamientos redundantes que controlan nuestras emociones, preparándonos para la acción. Pero... ¿Controlas tú a esos pensamientos o son ellos quiénes te controlan a ti? Antes de nada hay que reconocer esa voz interna que nos acompaña. Ese diálogo eternamente presente. ¿Lo reconoces? ¿Qué te suele decir? ¿Es un diálogo que te agradece cosas o en cambio te las reprocha? Te has fijado... ¿Qué pasa por ejemplo, cuando meditas? Las primeras veces parece sumamente complicado. Distraer los pensamientos. Recuerdas; ¿Cómo los distraías, con otros pensamientos? ¿Te funcionaba eso o te acercaba al bucle? ¿Qué pasa cuándo consigues concentrarte, por ejemplo en tu respiración? Ese diálogo continúa con su discurso. Aunque ya no es tan relevante para ti. Mientras meditas, estás a otras cosas. Estás presente y esos pensamientos se convierten en tu ruido. Los sientes pasar cual zumbido exterior sin perterubar tu interior. ¿Y si todo esto es posible? ¿Quién está pensando entonces? ¿Quién eres tú, el que piensa o el que mira cómo piensas? ¿El que se deja llevar por sus pensamientos o el que para y observa? ¿Los dos? ¿Ninguno? ¿Quién eres? Siempre eres tú y tu eliges qué foco te conviene más emplear. Puedes fluir mientras piensas o puedes aferrarte a esos pensamientos. Puedes parar y permitirte observar o puedes seguir repitiendo patrones. Puedes no hacer nada... también es una opción.
Permítete mirar adentro. Sólo se necesita asomar la cabeza para entender que eres mucho más que esa voz. Tus pensamientos sólo son una parte de ti y precisamente no la más importante. No te definen, sólo te preparan. No son tu identidad. Porque tú eres mucho más.
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